jueves, 8 de marzo de 2012

¡QUÉ ALTRUISMO!

Esto se ha publicado en un artículo de ABC Deportes:


(El subrayado fluorescente y la corrección ortográfica es de Cibeles Madridista, que ha renunciado a una corrección sintáctica o de puntuación cada vez más necesaria en los textos “castellanos” escritos en Farsaluña, de lo que CM se alegra como síntoma de que cada vez está mas cerca elmomento de no tener nada que ver con ese…”territorio”).
Quique Guasch - Barcelona     07 de marzo de 2012

Algunos aún no se han enterado de nada. Guardiola no está enfadado, está indignado. Harto. Y hasta el gorro. Como todo el barcelonismo. El técnico del Barça no es hombre de pataletas. Ni de hablar por hablar. Los que han querido ver en el enfado de Pep una justificación a los 10 puntos de diferencia con el Madrid, que se lo hagan mirar porque no han entendido nada y lo que es peor: se han perdido muchos capítulos de esta serie llamada Liga.
Guardiola no justificará una derrota en la competición por fallos de los colegiados. No será este técnico quien salga a rueda de prensa con 13 errores arbitrales en un papel. Quien espere a un colegiado en el parking de un estadio para increparlo. O quien permita que su capitán se despache a gusto en el túnel de vestuarios contra el árbitro.
Este no es Guardiola. Ni su estilo. Ni sus formas. Ni las del Barça. Aquí lo que calienta, lo que enerva al personal porque no es de recibido, ni justo y sí de competición de pandereta es que la vara de medir no sea la misma para unos que para otros. Que un equipo no pueda salir a competir con las mismas condiciones que sus rivales. Que la justicia, en definitiva, no sea igual para todos.
Esto es lo que tiene mosca a Pep y al barcelonismo. Ni la expulsión de Piqué. Ni los tres penaltis no pitados. Ni Valencia. Ni Getafe. Ni Cornellà. Ni Vallecas. Ni un largo etc. De eso ya ni nos quejamos. Lo lamentable, triste, reprobable y penoso es lo que viene después. Una tomadura de pelo constante e insoportable.
Siempre es preferible un combate franco con un adversario que tiene la deferencia de atacar de frente, sin emboscadas maquiavélicas. En este y sólo en este sentido, hay que felicitar al señor (deíctico) Guasch; no intenta esconderse (y eso que tiene mucho que esconder, como todo farsista). Pero no nos engaña su sonrisa bronceada; lo vemos venir de lejos (su hedor lo precede). Anda errado si cree que nos va a llevar al pesebre en el que ya pasta Villar.

Pero, yendo al grano, su “deposición” apesta por todos los lados. Detallemos por qué (evidentemente, traduciendo del farsalán lo preciso para entender el verdadero mensaje contenido en esta sarta de mendacidades):

  1. Es mentira que el Dalái Farsigrana esté “enfadado, indignado, harto o hasta el gorro”; y lo mismo vale para “todo el farsismo”. Lo que están es “A-S-U-S-T-A-D-O-S”. Vamos, que se lo están haciendo en los pantalones ante la perspectiva de tener que justificar que el “mejor equipo farsista de todos SUS tiempos” no sólo no gana la Liga al Madrid  “fracasado” del demagógico Mou sino que además se queda a una burrada de puntos de él. Supongo que eso hace de nuestro club el mejor del universo y con carácter eviterno (desde que comenzó el fútbol); pero eso no lo aclara el Sr. Guasch, tan entendido él del deporte rey.

  1. Es muy fácil acusar a los demás de no enterarse de qué va esto del fútbol “español” (con perdón). Desde luego, para estar tan convencido de estar en posesión exclusiva de toda la verdad hay que ser, además de un fanático, un manipulador, o sea, “olvidarse” convenientemente de cuanto también ha sucedido (por ejemplo, en la Copa, para que el Farsa va a jugar una final que no se ha ganado en los campos, sino en los silbatos), pero que contradice la tesis buenista del farsismo.

En cuanto a la “perdida” de capítulos (¿partidos?) de esta Liga, se le ha pasado al Sr. (deíctico) Guasch mencionar lo que pasó en el Vicente Calderón hace muy poco. En cambió (¡qué traicionera se vuelve la memoria con la edad!) habla del campo del Rayo Vallecano, supongo que refiriéndose al partido jugado el mismo día allí por el Madrid, no por el Farsa (así que no sé por qué incluye algo ajeno en su lista de agravios propios).

Y no quiero acabar este punto sin recordar que el equipo del Sr. (deíctico) Guasch se queja no sólo de lo que le perjudica según su propia interpretación (y desde luego que el farsismo sabe mucho de interpretación) sino incluso por aplicarle correctamente el reglamento (que es lo que pasó en Getafe o…en Violencia, el día de la final deCopa).

  1. En cuanto a la permisión del Dalái Farsigrana con las actividades antideportivas de sus pupilos, habrá que recordarle al Sr. (deíctico) Guasch que los  jugadores del Farsa tienen un amplio historial en este terreno; amplio, sistemático y “esencial”.

Empezando por la portería, Valdés es conocido por su afición a correr medio campo para asistir como protagonista a todos los líos (verbigracia, Mou o Cristiano).

Alves es un conocido depredador y teatrero que protesta más que respira y a quien sólo se permite su excepcional violencia porque le ampara el farsismo, con “F” de Federación de “Fúrbol”.

Piqué de Oro ya tuvo que ser sancionado en diciembre (por pisotear la norma Anti-Mou), pero no lo fue “por ser vos quien sois”. Y en cuanto a “dar” (y no precisamente al Domund)…

Puyol se dio a a conocer no por la calidad de su toque de balón sino dando patadas a Figo y no ha cambiado de actitud; también protesta como el que más y no siempre con corrección.

Busquets vale tanto para dar un patadón a Alonso según empieza la final de Copa (por supuesto, impunemente, porque él no se llama Pepe) como para jugar a balonmano en su área o interpretar como el mejor contra el Inter (aunque en vano).

Xavi pide respeto pero llama a los adversarios “animales” (Lass Diarra) y es de los que más acogotan a los árbitros en protestas tan constantes como ilegales (porque él no es el capitán de su equipo). También se podría haber ganado la vida muy bien de leñador.

Messi se dedica más de lo que cabría esperar de quien sabe jugar al fútbol a escupir, dar patadas, hacer gestitos, insultar…y goza de una conocidísima zona de exclusión en la que no pueden personarse los adversarios a mayor gloria del farsismo (luego no se gana sus méritos en “igualdad de condiciones” con, por ejemplo, Ronaldo).

Por último (por abreviar), no nos olvidemos de los Coros y Danzas de la Sección Farsalonina que con tanta frecuencia interpretan los jugadores farsistas rodeando a los colegiados (debe de ser una reminiscencia de la sardana). No lo tome a mal, Sr. (deíctico) Guasch si no cito a todos los farsistas ni enumero todas sus actividades “extras”; esto es sólo una relación sucinta de hechos en cantidad suficiente para hacer pensar al que aún no carezca de sentido del rídiculo; no un tratado exhaustivo de las trampas del Farsa. Faltaría espacio para recoger todas sus arterías en un artículo.

Pero bastaría con resumirlo todo en la última de Piqué de Oro, a quien el Dalái Farsigrana SÍ permitió quejarse en el campo, en el tunel de vestuarios y hasta en la caseta del árbitro después del partido (¡como el mismísimo Valdano! Será por lo del “piqué”). Sr. (deíctico) Guasch, si busca tontos, ha errado el tiro. Ya sabemos de qué calaña son Vds., así que no le vamos a hacer ni el menor caso a sus lágrimas de cocodrilo interesado y selectivo.

  1. Al final resulta que el Farsa no se dedica a jugar al fútbol para complacer a sus aficionados con sus éxitos (merecidos o no) sino que todo lo que le importa en el fondo  es el triunfo de la verdad y de la justicia en la Tierra.

¡¡¡Que altruiiiiiiismo!!! Bueno, si esto es así, ya le pueden ir mandando Vds. una Champions al Milán (lo digo por lo del gol que le anularon a Shevchenko en las semifinales), otra al Chelsea (no hace falta que le dé detalles, claro) y otra al Madrid, por la comedia anti-Pepe (ya oficial gracias a Associated Press de América). Bueno, y las ligas de Tenerife….Nuevamente, va a faltar espacio. Pero, repito, no se canse para nada; que los tontos del Madrid se murieron de estupiditis hace mucho ya; no le va a servir hacerse el “digno” después de ver en qué consisten sus “valores“ farsistas.

En fin, no sé si lo que más asquea de los manipuladores es que te intenten engañar o que supongan que eres tan tondo como es preciso para tragarse sus mentiras. En cualquier caso, por una cuestión de salud mental, acostumbramos a no escuchar nada que provenga de Farsistán. Si alguna vez, como aquí, lo hacemos, es para mostrar que el así autollamado rey de la deportividad y la justicia “está desnudo”.

Antonimus.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡¡¡DE ACUERDO!!! Y si es periodista el tal Guau que no olvide que en comunicación hay que distinguir una declaración privada(Casillas y Mou se dirigieron personalmente al árbitro en los casos que menciona) de una pública (el "listo" de Piqué o picó, hace una declaración pública, a través de los mass-media). Que ese perio... vuelva a la Facultad, o vaya por primera vez, lo que proceda.


Luigi Vinci



L. Vinci